En cada espacio, en cada lugar, existen sabores característicos. Todos los sitios a los que viajamos nos proporcionan, de forma más o menos precisa, una aventura culinaria. Si comenzamos a hablar sobre unos bollos cocidos al vapor, rellenos de carne o de verduras, y, para dar más pistas, añadimos que el nombre de este plato proviene del idioma chino, ¿sabéis de que os estamos hablando?
Literalmente en ese idioma se denomina así, bollo cocido; como se sabe, #China ha irradiado su cultura por muchos lugares de Asia.
Para más señas podemos hacer hincapié en que existen distintas presentaciones, para los no vegetarianos las podemos encontrar rellenas de carne, y, si nos decantamos más por las verduras, también las hay rellenas de vegetales. Sí preferimos el queso, las encontramos también con este sabor.
Algunos de vosotros quizás habréis comido #samosas o #pakoras, unas empanadillas típicas de la #India, es común verlas en los restaurantes hindús, rellenas de carne o de algún otro elemento que dan el sabor esencial del mismo, aderezadas con curry, además de tener una forma triangular. Nada que ver con estas afamadas empanadillas de #Nepal. Este plato del que os hablo ha sido asimilado por el pueblo nepalí, ya que su origen está en el #Tíbet, y es imposible resistirse a probar uno, además su color casi blanquecino, otorgado por la harina de cebada, es simplemente la cualidad por la que nos llama la atención. Su preparación es sencilla. Para realizar su masa se necesita harina —no necesariamente de cebada—, se la mezcla con agua hasta conseguir una masa flexible y sin grumos.
El relleno se puede preparar a base de carne o de verduras, dependiendo de lo que nos apetezca en ese momento. El relleno de verduras es una mezcla de cilantro, ajo, col, jengibre, tofu, setas y cebollas, y el de carne se hace reemplazando las setas y el tofu por carne picada, sazonada al gusto. El relleno se tiene que cocinar antes de introducirlo en la masa. Una vez que se envuelven con la masa de harina y agua, se cuecen en una olla al vapor con caldo, y listos para degustar. En alguna ocasión, después de este proceso se fríen en aceite, aunque no es lo más habitual.
En Nepal es común que los vendan, aparte de en pequeños establecimientos, en la calle, en unos carritos, y nos los sirvan en un plato o recipiente desechable, acompañados de una salsa hecha a base de muchas, variadas y, como no, picantes especias. No comeremos solos, es usual que mucha gente los consuma y nos acompañe en su degustación.
Se puede acompañar con un Tongba, cerveza caliente, en el caso que se necesite consumir algún líquido para saciar la sed.
Además de conocer los hermosos paisajes, la cultura y otros elementos típicos del lugar, cuando viajes a Nepal, no te olvides de probar este plato delicioso, no hacerlo sería perderse algo de lo que después podrías arrepentirte, se pide con el nombre de #MOMO. ¡Les encantarán!
Para más información puedes contactar con nosotros en este link, o bien visitar los recorridos en el apartado de Viajes a Nepal.
Landscapes of Asia es el receptivo para tus viajes a #SriLanka, #Maldivas, #Nepal, #Tibet, #India y #Bhutan.
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